En la industria alimentaria, y especialmente en plantas frigoríficas, cámaras de conservación y entornos de procesamiento de productos congelados, la precisión del pesaje es una necesidad constante. Sin embargo, trabajar en temperaturas bajo cero presenta desafíos únicos para los instrumentos de medición. Las balanzas industriales diseñadas para operar en frío extremo cumplen una función esencial: mantener la exactitud y la fiabilidad incluso en condiciones térmicas desfavorables.